Inicio > actualidad > Guía Completa del Transporte Público en EE.UU.: Ciudades Costos y Opciones de Movilidad
Moverse en Estados Unidos sin carro es posible, pero la experiencia puede ser diferente en dependencia de la ciudad donde se vive o a la que se vaya de visita.
Casi al cierre de 2025, varias áreas metropolitanas han mejorado su transporte público, han ampliado líneas de metro y tren ligero y han incorporado más opciones de pago digital.
Sin embargo aún existen muchas ciudades donde se depende o emplean más los automóviles.
Esta guía actualizada con datos a finales de 2025 y una mirada a lo que viene en 2026 te ayudará a entender qué tipo de transporte público existe en estos momentos en EE.UU.
Asimismo a través de este artículo D-Cuba conocerás cuánto se puede gastar en pasajes, cuáles son las mejores ciudades para vivir sin carro y qué alternativas se tiene si se llega como turista, estudiante o migrante.
En Estados Unidos el transporte público no está organizado de forma centralizada: cada ciudad o condado administra sus propios buses, metros y trenes, con reglas, tarifas y aplicaciones diferentes.
Eso significa que antes de viajar conviene revisar la página oficial de transporte de la ciudad de destino, para ver mapas de rutas, horarios y métodos de pago vigentes.
En general, las grandes ciudades de la Costa Este y la Costa Oeste suelen tener sistemas más completos, con redes de bus y metro que funcionan todos los días, mientras que las zonas rurales y muchos suburbios ofrecen pocas rutas y horarios limitados.
Es por eso que es clave saber si el barrio donde se reside o se visita está cerca de una estación de metro o parada de bus importante, sobre todo si se acaba de llegar y aún no cuentas con auto propio.
Tipos de transporte público disponibles
En cuanto a los tipos de transporte públicos en la mayoría de las áreas metropolitanas importantes se pueden encontrar una combinación de varios medios de transporte.
Entre los cuales podemos mencionar los siguientes:
Autobuses urbanos: son la opción más extendida y llegan a casi todos los barrios donde existe algún tipo de servicio público. Suelen tener tarifas más económicas y conectan con estaciones de metro o tren.
Metro y tren ligero: presentes en ciudades como Nueva York, Washington D. C., Chicago, Boston, Filadelfia, San Francisco, Los Ángeles, Seattle o Miami, aunque con diferente cobertura y frecuencia. Permiten moverse rápido en zonas céntricas y en los corredores con más tráfico.
Trenes de cercanías: conectan suburbios y ciudades satélite con el centro de la metrópoli, útiles si vives en las afueras y trabajas en el downtown. Servicios como Metra (Chicago), Caltrain (Área de la Bahía), o los trenes de cercanías en la Costa Este son ejemplos típicos.
Trenes interurbanos (Amtrak): sirven para viajes entre ciudades y estados, aunque no son tan frecuentes ni económicos como los buses de larga distancia.
Tranvías, ferris y otros sistemas: algunas ciudades conservan tranvías históricos o modernos, tienen ferris para cruzar bahías o ríos, o cuentan con sistemas singulares como los icónicos (cable cars) de San Francisco.
Ciudades donde es más fácil vivir sin carro
Aunque el transporte público existe en casi todos los estados, solo algunas ciudades permiten realmente vivir sin carro de forma cómoda.
Entre las más destacadas están:
Nueva York: combina una red de metro extensa que funciona 24 horas, buses en los cinco distritos y trenes de cercanías hacia suburbios de Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut. Es el ejemplo clásico de ciudad donde muchas personas nunca compran coche.
Washington D. C.: su metro y red de buses conectan bien el distrito y partes de Maryland y Virginia, especialmente si se vive cerca de las líneas principales.
Boston: tiene metro, tren ligero, buses y ferris, lo que facilita moverse sin carro en la ciudad y en algunos suburbios cercanos.
Chicago: el tren elevado (L) y los buses cubren gran parte de la ciudad, complementados por trenes de cercanías hacia el área metropolitana.
San Francisco y Área de la Bahía: combinan metro regional (BART), trenes de cercanías, tranvías, ferris y buses, aunque las distancias y el costo de vida son altos.
Seattle y otras urbes en expansión: han invertido en tren ligero, buses rápidos y ferris, haciendo más viable vivir sin carro en determinados barrios.
En contraste, muchas ciudades medianas del sur y del centro del país tienen redes de bus limitadas y muy pocos servicios nocturnos, por lo que pueden requerir un vehículo propio o depender mucho de taxis y aplicaciones de movilidad.
Costos aproximados del transporte público (cierre 2025)
Los precios exactos varían según la ciudad, la distancia y el tipo de servicio, pero a finales de 2025 se mantiene un rango bastante similar en la mayoría de sistemas urbanos.
Pasaje sencillo: suele moverse entre 1,50 y 3 dólares por viaje en buses y metro, dependiendo de la ciudad y si el sistema cobra tarifa plana o por zonas.
Pases diarios y semanales: muchos sistemas ofrecen abonos de 1 día, 7 días o fines de semana ilimitados que permiten ahorrar si se hacen varios viajes.
Pases mensuales: son la opción favorita para residentes y estudiantes, ya que reducen el costo promedio por viaje cuando se usa el transporte todos los días.
Descuentos especiales: en muchas ciudades hay tarifas reducidas para estudiantes, personas mayores, personas con discapacidad y, en algunos casos, residentes de bajos ingresos.
En los últimos años algunas urbes han puesto a prueba programas de transporte gratuito en ciertas líneas o para grupos específicos, y se espera que en 2026 continúe el debate y la expansión de esquemas de tarifa cero en sistemas pequeños y medianos.
Tabla orientativa de ciudades, sistemas y costos
Los valores de la siguiente tabla son aproximados, pensados para tener una idea general de tipos de transporte y rangos de precios que se pueden encontrar a finales de 2025.
Formas de pago: tarjetas, aplicaciones y efectivo
Comparativa de sistemas de transporte público en ciudades de EE. UU.
Ciudad
Sistema principal
Tarifa de viaje sencillo (aprox.)
Pases habituales
¿Es viable sin carro?
Nueva York
Metro y buses urbanos
2,75–3,25 dólares por viaje
Pases de 7 y 30 días
Sí, en casi toda la ciudad
Washington D. C.
Metro y buses regionales
Desde 2 dólares, varía según distancia
Pases diarios y semanales
Sí, sobre todo en zonas bien conectadas
Boston
Metro, tren ligero y buses
En torno a 2–3 dólares
Abonos mensuales para metro y bus
Sí, en ciudad y suburbios cercanos
Chicago
Tren elevado (L) y buses
2–3 dólares por viaje
Pases 1, 7 y 30 días
Sí, en áreas centrales y bien servidas
Los Ángeles
Metro ligero y buses
1,75–2,00 dólares por viaje
Pases diarios y mensuales
Parcialmente, depende mucho del barrio
San Francisco / Área de la Bahía
Metro regional, tranvías, buses y ferris
Mayoría entre 2 y 4 dólares
Pases regionales y tarjetas recargables
Sí, en varias zonas urbanas
Una de las principales novedades de los últimos años es la expansión del pago sin contacto y las tarjetas inteligentes en casi todos los sistemas grandes de transporte.
Tarjetas recargables: muchas ciudades utilizan tarjetas de plástico que se cargan con saldo o con pases ilimitados, y se validan al entrar al metro o al subir al bus.
Pago con teléfono o tarjeta bancaria: en varios sistemas ya puedes pagar acercando tu tarjeta bancaria o tu celular con billetera digital, sin necesidad de comprar una tarjeta específica.
Apps oficiales: casi todas las agencias de transporte tienen aplicaciones para consultar horarios, planificar rutas y, en algunos casos, comprar boletos digitales que se muestran en la pantalla del teléfono.
Efectivo: en muchos buses todavía se acepta efectivo, pero es menos práctico y, en algunos casos, no permite transferencias gratuitas a otros servicios.
Para 2026 se espera que más sistemas pequeños adopten pago sin contacto y que aumenten las integraciones entre apps de transporte público, bicicletas y patinetes compartidos en una misma plataforma.
Opciones de movilidad complementaria
Además del transporte público tradicional, en casi todas las ciudades medianas y grandes se pueden encontrar otros medios de movilidad que se puede combinar según el presupuesto y las necesidades.
Taxis y apps de transporte (Uber, Lyft): útiles para trayectos nocturnos, cuando no hay bus o metro, o para barrios con poca cobertura.
Bicicletas y patinetes compartidos: muchas ciudades tienen estaciones de bicicletas públicas o patinetes eléctricos, que se desbloquean con una app y se pagan por minutos o por tramo.
Carsharing: algunas empresas permiten alquilar un coche por horas y recogerlo en puntos específicos, lo que puede ser una alternativa si solo se necesita conducir ocasionalmente.
En caso de emplear estas opciones, conviene revisar las normas locales sobre uso de casco, circulación en aceras o ciclovías, y horarios en los que está permitido operar.
Consejos prácticos para cubanos y latinos recién llegados
Quienes llegan desde países donde el transporte público funciona de forma diferente pueden encontrarse con varias sorpresas, es por ello que se aconseja lo siguiente:
Planificar antes de salir: usa Google Maps o la app oficial de la ciudad para ver la mejor ruta, ya que no siempre hay personas disponibles para dar indicaciones.
Llevar saldo suficiente: recarga la tarjeta o billetera digital con antelación, sobre todo en caso de viajar en horas pico o de noche.
Revisar horarios: en muchas ciudades los buses reducen frecuencias en la noche y fines de semana, y algunas rutas no funcionan los domingos.
Seguridad básica: evitar exhibir objetos de valor, mantener la mochila cerrada y esperar en zonas iluminadas o en estaciones con personal siempre que sea posible.
Perspectivas para 2026 en el transporte público de EE.UU.
Varios proyectos de expansión de metro y tren ligero siguen en construcción y se irán inaugurando entre 2026 y los próximos años, especialmente en la Costa Oeste y en áreas metropolitanas en crecimiento.
Además, continúa la discusión sobre ampliar programas de tarifa reducida o gratuita para ciertos grupos, ante el aumento del costo de vida y el interés por reducir el tráfico y la contaminación.
También se espera que las agencias sigan modernizando flotas, incorporando más autobuses eléctricos y mejorando la accesibilidad para personas con discapacidad.
Al mismo tiempo se prevé la integración más completa del transporte público con bicicletas, patinetes y de otros servicios de movilidad bajo demanda.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Cuánto dinero se debe reservar al mes para transporte público en una ciudad grande de EE.UU.?
En una gran ciudad donde se use metro y bus casi todos los días, un pase mensual puede costar entre 60 y más de 150 dólares, según el sistema y el tipo de abono. Si se viaja poco, puede bastar con pagar viajes sueltos o comprar pases semanales cuando se tenga más desplazamientos.
¿Puedo moverme solo en bus si no hay metro?
Sí, en muchas ciudades el bus es el eje principal del transporte público, pero se debe considerar que el viaje puede tomar más tiempo, sobre todo en horas pico o si hay transbordos. Siempre se debe revisar el mapa del sistema para ver si hay líneas rápidas o carriles exclusivos que hagan el recorrido más eficiente.
¿Qué app debo usar para planificar rutas?
Además de Google Maps, que funciona bien en la mayoría de las ciudades, casi todas las agencias tienen su propia app con horarios, alertas de servicio y, en algunos casos, venta de boletos electrónicos. Algunas plataformas de terceros también integran buses, metro, bicicletas y patinetes en una sola interfaz.
¿Es seguro usar el transporte público de noche?
La seguridad depende mucho de la ciudad y la zona, pero en general conviene evitar vagones o paradas muy vacías, mantenerse atento al entorno y, si es posible, viajar acompañado en horarios muy tarde. En áreas con servicio limitado por la noche, puede ser más conveniente usar un taxi o una app de transporte.
¿Hay opciones gratuitas o muy baratas para estudiantes y personas de bajos ingresos?
Algunas ciudades ofrecen descuentos especiales, pases subsidiados o incluso transporte gratuito en ciertas rutas para estudiantes, personas mayores y personas con ingresos limitados. Para acceder suele ser necesario registrarse y demostrar residencia o estatus en programas locales, por lo que es importante consultar directamente la web del sistema de transporte de la ciudad.
¿Qué debo tener en cuenta si vengo desde Cuba u otro país latino?
Lo más importante es adaptarte a la puntualidad de los horarios, el uso de apps para todo y la necesidad de planificar bien las rutas. Obtener una tarjeta bancaria que funcione en EE.UU. y un teléfono con internet facilitará recargar tarjetas, comprar boletos digitales y consultar mapas en tiempo real.
El transporte público en EE.UU. varía según la ciudad, con opciones que van desde eficientes sistemas de metro hasta autobuses y alternativas de movilidad sostenible como bicicletas compartidas.
Lo más importante radica en conocer las mejores opciones y los costos ya que esto puede ayudar a residentes y visitantes a moverse de manera más eficiente y económica.
Formada en Comunicación Social en la Universidad de La Habana; posteriormente, me sumergí en el fascinante mundo digital, especializándome en Periodismo Digital
