Dónde Comer en La Habana Vieja

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Comer en La Habana Vieja es mucho más que sentarse a la mesa: es asomarse a la historia de la ciudad a través de sus sabores. En pocas cuadras conviven paladares creativos en antiguas casonas coloniales, cafés con música en vivo, ventanitas con comida casera y restaurantes de hotel con propuestas internacionales. Esta guía está pensada para que el visitante —y también el habanero curioso— encuentre opciones reales y actualizadas para distintos presupuestos y estilos, con recomendaciones prácticas que evitan sorpresas: horarios, reservas, medios de pago, qué pedir y cómo combinar cada comida con un paseo cercano.

Antes de elegir: consejos clave para acertar

Tipos de lugares y qué significan

  • Paladares (privados): suelen ser los más creativos y con mejor relación calidad-ambiente. Encontrarás reinterpretaciones de cocina cubana y fusiones.
  • Restaurantes estatales: cartas más clásicas, ubicaciones privilegiadas en edificios históricos, servicio variable.
  • Cafeterías y ventanitas: ideales para desayunos rápidos, meriendas o un almuerzo sencillo al paso.
  • Bares con tapas/coctelería: perfectos para picar y disfrutar de música o de una buena barra (mojito, daiquirí, canchánchara, etc.).

Reservas y horarios

  • Reserva para cenas populares y terrazas con vista, sobre todo en temporada alta o fines de semana.
  • Horarios extendidos no siempre significan cocina abierta completa; algunas cocinas reducen oferta fuera de las horas pico.

Disponibilidad y carta

  • Flexibilidad: pregunta por los “platos del día” y acepta sugerencias del personal; suelen indicar el producto más fresco.
  • Alergias y dietas: muchos lugares adaptan preparaciones si lo pides; avisa al comienzo (vegetariano/vegano/sin gluten).

Medios de pago y cuenta

  • Efectivo: sigue siendo útil para pequeñas compras y propinas.
  • Tarjetas: la aceptación puede variar; confirma antes de pedir. Ten a mano un plan B si hay fallos de conexión.
  • Propina: cuando el servicio es bueno, dejar propina es una práctica valorada.

Tiempo de servicio y expectativas

  • Ritmo caribeño: tómalo en cuenta si tienes una visita guiada o entradas con hora; evita pedir platos que requieran cocciones largas si vas justo de tiempo.
  • Compartir platos: pedir para compartir permite probar más sin elevar demasiado el costo.

Higiene y agua

  • Agua embotellada: recomendable. Si pides hielo, verifica que provenga de agua potable.
  • Frutas y ensaladas: elige opciones lavadas y peladas al momento en sitios confiables.

Seguridad y ubicaciones

  • Calles y horarios: las zonas turísticas principales son transitadas; de noche, muévete por rutas conocidas y plazas iluminadas.
  • Transporte: planifica el regreso (taxi, app local o caminata corta hasta arterias principales)

Fotografía y música en vivo

  • Ambientes con encanto: patios, balcones y salas con arte son excelentes para fotos. Pregunta antes si hay música en vivo; muchas casas organizan tríos o piano bar por la noche.

Zonas gastronómicas de La Habana Vieja y qué esperar en cada una

Zonas gastronómicas de La Habana Vieja y qué esperar en cada una

Plaza Vieja: tradición y terrazas animadas

Es una de las plazas más concurridas de La Habana Vieja y concentra varias opciones para comer al aire libre, en medio del bullicio de músicos, pintores y paseantes. Aquí abundan restaurantes con terrazas donde puedes disfrutar platos cubanos tradicionales, tapas internacionales y coctelería. Es ideal para una comida relajada mientras observas la vida cotidiana y el ir y venir de turistas y locales.

  • Ambiente: muy turístico, con terrazas llenas y ambiente festivo.
  • Qué probar: platos cubanos clásicos como ropa vieja, congrí o cerdo asado; también pizzas y cervezas nacionales.
  • Tip: perfecto para almorzar tras recorrer la plaza y sus galerías de arte.

Plaza de la Catedral y Callejón del Chorro: sabor cubano con historia

La Plaza de la Catedral es uno de los rincones más fotografiados de la ciudad. En sus alrededores encontrarás paladares muy conocidos que mantienen la esencia de la cocina criolla. El Callejón del Chorro, justo al lado, se ha convertido en un punto gastronómico con opciones muy visitadas por turistas y locales.

  • Ambiente: colonial, con fachadas históricas y música en vivo por las noches.
  • Qué probar: cocina cubana auténtica —ropa vieja, tamales, plátanos fritos— y platos de mariscos.
  • Tip: lugar perfecto para una cena romántica o para cerrar el día con un mojito.

Obispo es la arteria peatonal que conecta el Parque Central con la Plaza de Armas. A lo largo de sus cuadras encontrarás cafeterías, bares históricos y restaurantes de todo tipo, desde ventanitas económicas hasta lugares con menú internacional. Es un sitio ideal para quienes buscan comer bien sin alejarse del centro neurálgico del turismo en la ciudad.

  • Ambiente: bullicioso y muy concurrido; una mezcla de turistas, músicos ambulantes y locales.
  • Qué probar: desde sándwich cubano o pizzas rápidas hasta platos internacionales en restaurantes medianos.
  • Tip: bueno para desayunar o almorzar rápido antes de continuar el recorrido por los museos y tiendas de la calle.

Puerto y Avenida del Malecón: mariscos y vistas al mar

Cerca de la terminal de cruceros y el puerto se concentran restaurantes con especialidades en pescados y mariscos. También puedes encontrar bares modernos con vistas al mar en la Avenida del Malecón, que resultan atractivos para quienes desean una experiencia diferente, con aire fresco y panorámica de la bahía.

  • Ambiente: más tranquilo que las plazas céntricas, con brisa marina y vistas abiertas.
  • Qué probar: mariscos frescos, paellas y pescados al grill.
  • Tip: excelente opción para la cena al atardecer, con la puesta de sol sobre la bahía.

Rincones menos transitados: autenticidad y sorpresa

Más allá de las plazas y calles icónicas, La Habana Vieja esconde paladares en casas particulares y cafeterías familiares que ofrecen comida casera a precios más bajos que los de las zonas más turísticas. Son ideales para quienes buscan autenticidad y trato cercano.

  • Ambiente: discreto y hogareño, con pocos turistas.
  • Qué probar: platos del día, arroz con pollo, potajes, jugos naturales y postres caseros.
  • Tip: pregunta a los vecinos o consulta carteles en puertas: algunos no tienen gran publicidad pero sorprenden en sabor y atención.

Restaurantes y paladares recomendados en La Habana Vieja

En esta sección se presentan opciones variadas, organizadas por zonas y estilos, para que cada viajero encuentre el lugar que más se ajuste a su presupuesto y expectativas.

Plaza Vieja y alrededores

Cervecería Plaza Vieja

  • Especialidad: cerveza artesanal servida directamente de los tanques, acompañada de tapas y parrilladas.
  • Ambiente: amplio, animado y con música en vivo. Perfecto para grupos.
  • Precio: medio, con opción de compartir jarras grandes.

Azúcar Lounge & Bar

  • Especialidad: cocteles modernos, tapas internacionales y platos ligeros.
  • Ambiente: terraza con vista privilegiada a la Plaza Vieja, decoración contemporánea.
  • Precio: medio-alto, ideal para cena con vistas.

Plaza de la Catedral y Callejón del Chorro

Doña Eutimia

  • Especialidad: cocina cubana casera, famosa por su ropa vieja y tamales.
  • Ambiente: pequeño, acogedor y siempre concurrido.
  • Precio: accesible; excelente relación calidad-precio.
  • Tip: imprescindible reservar, sobre todo en cena.

El Patio

  • Especialidad: platos cubanos e internacionales.
  • Ambiente: restaurante elegante ubicado en una casona colonial con mesas al aire libre en la Plaza de la Catedral.
  • Precio: medio-alto.
  • Tip: ideal para cenas románticas o con ambiente refinado.

Calle Obispo y alrededores

La Floridita

  • Especialidad: daiquirí original y platos de pescados y mariscos.
  • Ambiente: histórico, famoso por su vínculo con Ernest Hemingway; siempre lleno de turistas.
  • Precio: alto en comparación con la media, pero vale por la experiencia.

NAO Bar Paladar

  • Especialidad: cocina cubana con toques contemporáneos, buen arroz con frijoles y carnes a la brasa.
  • Ambiente: relajado, con música y decoración moderna.
  • Precio: medio.

Puerto y Malecón

Paladar Los Mercaderes

  • Especialidad: platos de autor que mezclan cocina cubana con influencias internacionales; mariscos destacados.
  • Ambiente: elegante y romántico, con decoración colonial.
  • Precio: alto, recomendado para ocasiones especiales.

Café del Oriente

  • Especialidad: cocina internacional con servicio refinado.
  • Ambiente: uno de los restaurantes más lujosos de La Habana, en un edificio histórico frente a la Plaza de San Francisco.
  • Precio: alto.
  • Tip: excelente para quienes buscan una experiencia gastronómica sofisticada.

Rincones alternativos

La Guarida (aunque ubicada fuera del núcleo de la Habana Vieja, es imprescindible)

  • Especialidad: platos de alta cocina cubana, reinterpretaciones de recetas tradicionales.
  • Ambiente: icónico, en un edificio histórico con decoración bohemia; escenario de la película Fresa y Chocolate.
  • Precio: alto.
  • Tip: uno de los restaurantes más famosos de Cuba; reservar con mucha antelación.

La Vitrola (en la Plaza Vieja)

  • Especialidad: sándwiches, tapas, jugos y cocteles.
  • Ambiente: informal, muy concurrido, con decoración retro.
  • Precio: bajo-medio.
  • Tip: excelente para almorzar rápido y económico en plena Plaza Vieja.

Recomendaciones según presupuesto

Recomendaciones según presupuesto

Opciones económicas

Ideales para quienes quieren comer bien sin gastar demasiado:

  • La Vitrola (Plaza Vieja): tapas, sándwiches y jugos a precios accesibles.
  • Cafeterías y ventanitas en Obispo: pizzas al paso, batidos de frutas, sándwich cubano.
  • Comida casera en rincones poco turísticos: arroz con pollo, potajes y jugos naturales en pequeños paladares familiares.

Rango de precio aproximado: 3–8 USD por persona.

Opciones de presupuesto medio

Equilibran calidad, ambiente y precio:

  • Doña Eutimia (Callejón del Chorro): cocina cubana auténtica, gran relación calidad-precio.
  • NAO Bar Paladar (Obispo): platos cubanos e internacionales con ambiente relajado.
  • Azúcar Lounge & Bar (Plaza Vieja): tapas modernas y coctelería con vistas.

Rango de precio aproximado: 10–20 USD por persona.

Opciones exclusivas y de ocasión especial

Perfectas para una cena romántica, de negocios o para celebrar:

  • Los Mercaderes (Puerto): cocina de autor, mariscos y decoración colonial elegante.
  • Café del Oriente (Plaza de San Francisco): servicio refinado y ambiente histórico.
  • La Guarida: icono cultural y gastronómico de Cuba, imprescindible reservar.

Rango de precio aproximado: 25–40 USD por persona.

Platos imprescindibles y especialidades para probar en La Habana Vieja

Comer en La Habana Vieja no solo significa elegir un buen restaurante, sino también saber qué pedir para disfrutar de la auténtica experiencia cubana. Estos son algunos de los platos y bebidas que no deberían faltar en tu visita:

Platos principales

  • Ropa Vieja: carne de res desmechada en salsa de tomate con especias. Es probablemente el plato cubano más famoso.
  • Lechón Asado: cerdo marinado con mojo criollo, asado lentamente hasta quedar jugoso y crujiente.
  • Arroz con Pollo: un clásico casero, muy sabroso y abundante.
  • Picadillo a la Habanera: carne molida guisada con pasas, aceitunas y papas fritas, que le da un toque agridulce muy particular.
  • Langosta al Grill: muy solicitada en los restaurantes cercanos al puerto y el Malecón.

Acompañamientos y guarniciones

  • Congrí o Moros y Cristianos: arroz cocido con frijoles negros o colorados, base inseparable de la mesa cubana.
  • Yuca con Mojo: yuca hervida con una salsa de ajo y cítricos.
  • Tostones o Mariquitas: plátanos verdes fritos, crujientes y perfectos para compartir.
  • Viandas fritas: malanga, boniato o yuca en chips.

Postres típicos

  • Flan de Leche: sencillo, cremoso y siempre presente en los menús.
  • Natilla: postre suave a base de leche, similar a la crema catalana.
  • Dulce de Coco: preparado con coco rallado y almíbar.
  • Helado Coppelia (si sales del casco histórico): todo un símbolo en La Habana.

Bebidas que no pueden faltar

  • Mojito: ron, hierbabuena, limón, azúcar y soda; refrescante y cubano por excelencia.
  • Daiquirí: originario del bar Floridita, con ron, limón y azúcar.
  • Cuba Libre: ron con cola y unas gotas de limón.
  • Guarapo: jugo de caña de azúcar, ideal para refrescarse en el día.
  • Batidos naturales: de mango, guayaba, piña o mamey, disponibles en cafeterías y ventanitas.

Consejos prácticos para el viajero gastronómico en La Habana Vieja

Horarios recomendados

  • Desayuno: entre 8:00 y 10:00 a.m., en cafeterías y ventanitas con café cubano, pan con tortilla o jugos naturales.
  • Almuerzo: de 12:00 a 2:30 p.m., momento en que los restaurantes tienen la carta más completa.
  • Cena: entre 7:00 y 9:00 p.m.; en algunos sitios la cocina cierra temprano, así que conviene confirmar.

Reservas y tiempos de espera

  • Haz reservas en restaurantes populares como Doña Eutimia, Los Mercaderes o La Guarida, especialmente para la cena.
  • Paciencia con el servicio: en Cuba los tiempos suelen ser más lentos; aprovecha para disfrutar del ambiente y la música en vivo.

Medios de pago

  • Efectivo en divisas (USD o EUR): aceptado en la mayoría de los paladares privados.
  • Moneda Nacional (CUP): útil en cafeterías y ventanitas, aunque los precios para extranjeros suelen darse en divisas.
  • Tarjetas: Visa y Mastercard internacionales pueden funcionar, pero a veces hay problemas de conexión; ten siempre un plan B en efectivo.

Propinas y servicio

  • En muchos restaurantes ya incluyen un 10% de servicio en la cuenta; revisa antes de dejar propina adicional.
  • Cuando no está incluido, lo habitual es dejar entre 10% y 15% si el servicio fue bueno.

Seguridad y movilidad

  • Zonas turísticas como Obispo, Catedral y Plaza Vieja son seguras; aun así, cuida tus pertenencias en lugares muy concurridos.
  • Si cenas tarde, considera regresar en taxi o con transporte seguro en lugar de caminar por calles solitarias.

Higiene y consumo de agua

  • Pide siempre agua embotellada en restaurantes o ventanitas.
  • Evita el hielo en lugares donde no tengas certeza de su procedencia.
  • Prefiere frutas peladas al momento para evitar riesgos digestivos.

Cómo combinar turismo y gastronomía

  • Plaza Vieja: almuerza o cena mientras disfrutas de galerías de arte y del ambiente festivo.
  • Catedral y Callejón del Chorro: perfecto para cenar tras visitar el Museo de Arte Colonial o escuchar música en vivo.
  • Obispo: ideal para un almuerzo rápido antes de recorrer el Museo Numismático o la Plaza de Armas.
  • Puerto y Malecón: excelente opción para una cena con vistas al mar después de pasear al atardecer.

Comer en La Habana Vieja es mucho más que saciar el hambre: es entrar en contacto con la cultura cubana a través de sus sabores, sus ritmos y la calidez de sus espacios. Desde los paladares más reconocidos hasta las ventanitas escondidas en callejones menos transitados, cada rincón ofrece una experiencia distinta.

La clave está en adaptar la elección al momento y al presupuesto: desayunar en Obispo, almorzar en un clásico del Callejón del Chorro, tomar un batido en la Plaza Vieja y cerrar el día con una cena frente al mar. Así, el recorrido gastronómico se convierte en parte inseparable del viaje.

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Michel Díaz

Graduado de Comunicación Social en la Universidad de Oriente en 2019, y enamorado del periodismo digital desde siempre.

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