En el año 2025, la situación sanitaria en Cuba sigue marcada por una combinación de factores que han agravado la aparición y el manejo de enfermedades, tanto infecciosas como crónicas. La persistente crisis económica, el limitado acceso a medicamentos y tratamientos, la degradación de infraestructuras sanitarias, así como la migración de profesionales de la salud, han dejado huellas profundas en la capacidad del sistema para responder eficazmente a los desafíos epidemiológicos del país.
La salud pública en Cuba atraviesa uno de sus momentos más complejos en décadas. Enfermedades prevenibles están resurgiendo con fuerza, mientras que padecimientos crónicos como la hipertensión o la diabetes afectan a una proporción cada vez mayor de la población. A esto se suman nuevos riesgos relacionados con virus emergentes y el deterioro de las condiciones de vida.
Frente a este escenario, resulta fundamental para toda persona que vive en Cuba, viaja al país o tiene familiares en la isla, conocer cuáles son las enfermedades más comunes en 2025, cómo prevenirlas de forma efectiva y qué hacer en caso de presentar síntomas. Contar con información actualizada y estrategias accesibles puede hacer una gran diferencia, especialmente cuando los recursos escasean.
En esta guía encontrarás un panorama completo y práctico de las enfermedades más frecuentes en Cuba hoy: desde las más comunes entre niños y adultos mayores, hasta los brotes epidémicos recientes, con énfasis en la prevención y el manejo seguro en contextos de escasez. El propósito es ofrecer un recurso útil, confiable y adaptado a la realidad cubana.
Indice
La salud de la población cubana en 2025 está profundamente condicionada por una serie de factores estructurales que han ido acumulándose con el tiempo. Estos factores no solo explican el aumento de enfermedades comunes, sino también la dificultad para prevenirlas o tratarlas de manera efectiva. A continuación, analizamos los más determinantes:
La inflación, el desabastecimiento de productos básicos y la pérdida del poder adquisitivo han hecho que millones de cubanos tengan dificultades para mantener una dieta balanceada, acceder a agua potable o adquirir productos de higiene. Esto favorece el debilitamiento del sistema inmunológico y la propagación de enfermedades transmisibles.
El sistema de acueducto y alcantarillado presenta graves deficiencias en muchas zonas del país, lo cual contribuye a brotes de enfermedades transmitidas por agua contaminada, como la leptospirosis, las parasitosis intestinales y la hepatitis A.
Las altas temperaturas, las lluvias intensas y la falta de control de focos de mosquitos han incrementado los riesgos de transmisión de enfermedades como el dengue, el Zika y el virus del Oropouche. A esto se suma la presencia de cucarachas, ratas y otras plagas asociadas a problemas de salubridad.
Cuba cuenta con una de las poblaciones más envejecidas de América Latina. Esto incrementa la incidencia de enfermedades crónicas como la hipertensión, la diabetes y la enfermedad renal crónica, y exige mayores esfuerzos en cuidados prolongados y medicamentos específicos.
Las farmacias cubanas presentan una escasez crónica de medicamentos esenciales: antibióticos, analgésicos, antihipertensivos, insulina, entre otros. Muchas veces los pacientes deben recurrir a donaciones, compras en el extranjero o el mercado informal, lo que supone riesgos de falsificación o uso inadecuado.
Los hospitales y policlínicos suelen estar sobrecargados, especialmente durante los picos de enfermedades respiratorias o brotes epidémicos. Las listas de espera para consultas o cirugías se han vuelto más largas y muchos tratamientos se postergan por falta de recursos.
Aunque Cuba cuenta con experiencia en el manejo de enfermedades transmisibles, en 2025 el monitoreo de brotes se ha vuelto más difícil por la falta de reactivos, transporte y conectividad. Esto limita la detección temprana de focos y la aplicación de medidas preventivas efectivas.
Las zonas rurales, montañosas o de difícil acceso tienen menos infraestructura médica disponible. Además, existen diferencias marcadas entre quienes pueden pagar atención en moneda libremente convertible (MLC) y quienes dependen completamente del sistema gratuito, hoy colapsado.
Las enfermedades infecciosas siguen siendo una preocupación central para la salud pública en Cuba en 2025. Su propagación se ve favorecida por factores como el clima tropical, la crisis del sistema sanitario, el deficiente acceso al agua potable y la falta de medicamentos para tratamientos prolongados. En esta sección abordamos las infecciones más frecuentes actualmente, su comportamiento, síntomas, prevención y opciones de manejo.
El dengue continúa siendo una de las enfermedades más recurrentes y peligrosas en Cuba. En 2025, se ha reportado una elevada incidencia en provincias como Santiago de Cuba, Holguín, La Habana y Cienfuegos, donde los brotes tienden a intensificarse en temporada de lluvias (junio-septiembre).
Síntomas comunes del dengue:
Prevención:
Tratamiento:
El virus del Oropouche ha resurgido en varias regiones del oriente cubano y preocupa por su similitud clínica con el dengue. Se transmite por un mosquito diferente (Culicoides), por lo que los focos pueden surgir incluso donde no hay Aedes aegypti.
Síntomas similares al dengue:
Diferencias importantes:
Prevención y tratamiento:
Aunque la pandemia ha sido oficialmente controlada, la COVID-19 sigue circulando en Cuba, especialmente durante los cambios de estación. Las nuevas variantes presentan síntomas más leves pero altamente contagiosos.
Síntomas frecuentes en 2025:
Medidas preventivas:
Tratamiento:
Además del coronavirus, se han reportado aumentos de casos de influenza, bronquitis, neumonía y otras infecciones respiratorias agudas, principalmente en personas mayores y niños.
Recomendaciones:
La tuberculosis (TB) no ha desaparecido en Cuba. Al contrario, su control se ha visto afectado por la escasez de pruebas diagnósticas y el abandono de tratamientos debido a la falta de medicamentos.
Formas de contagio:
Síntomas principales:
Tratamiento:
Aunque la transmisión del VIH ha disminuido levemente en algunas regiones, aún se reportan nuevos casos, especialmente en jóvenes y poblaciones vulnerables. Las campañas de prevención han disminuido en frecuencia y acceso al tratamiento antirretroviral (ARV) ha sido irregular.
Formas de prevención:
Situación actual:
Esta enfermedad afecta principalmente a niños y personas que viven en condiciones sanitarias precarias.
Síntomas:
Prevención:
Frecuente tras lluvias intensas e inundaciones. Se transmite por contacto con orina de animales infectados, especialmente ratas.
Síntomas:
Recomendaciones:
Debido a las condiciones de higiene, muchas personas padecen infecciones intestinales recurrentes.
Síntomas comunes:
Prevención y manejo:
Aunque las enfermedades infecciosas ocupan un lugar importante en el sistema sanitario cubano, las enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) representan la causa principal de morbilidad y mortalidad en el país. En 2025, su impacto se ha agravado por la combinación de factores como el envejecimiento poblacional, la escasez de medicamentos, la falta de seguimiento clínico y la imposibilidad de mantener una alimentación adecuada o un estilo de vida saludable.
La hipertensión afecta a una proporción creciente de cubanos. Según estimaciones recientes, más del 30% de los adultos mayores de 35 años presenta presión arterial elevada, y en muchos casos sin diagnóstico o tratamiento regular.
Factores que agravan la hipertensión en Cuba:
Síntomas más comunes:
Consecuencias si no se trata:
Recomendaciones prácticas:
La diabetes es cada vez más frecuente, incluso entre personas jóvenes. La falta de insulina y medicamentos orales en el sistema público ha obligado a muchos pacientes a ajustar sus tratamientos, a veces de forma riesgosa.
Causas más frecuentes:
Síntomas de alerta:
Complicaciones comunes:
Consejos para el control sin acceso regular a medicamentos:
La enfermedad renal crónica está en aumento, sobre todo como consecuencia de hipertensión o diabetes mal controladas. En muchos casos, los pacientes no tienen acceso estable a análisis de creatinina o a tratamientos de diálisis.
Síntomas más comunes en etapas avanzadas:
Factores de riesgo adicionales:
Prevención:
Los infartos de miocardio, accidentes cerebrovasculares y otras enfermedades del corazón están entre las principales causas de muerte en Cuba. Muchas veces ocurren en personas que no sabían que estaban enfermas o que no lograron tratarse a tiempo.
Síntomas de alerta (infarto):
Síntomas de un posible derrame cerebral:
Factores de riesgo:
Recomendaciones para reducir riesgos:
La salud mental se ha convertido en uno de los temas más delicados y menos visibilizados en el panorama sanitario cubano. En 2025, los niveles de estrés, ansiedad, depresión y agotamiento emocional han aumentado notablemente entre personas de todas las edades, como consecuencia directa de la situación económica, la inseguridad alimentaria, la migración forzada, la incertidumbre y el deterioro de las condiciones de vida.
A pesar de su creciente impacto, el sistema de salud mental en Cuba enfrenta graves limitaciones: escasez de psicólogos y psiquiatras, falta de acceso a medicamentos psicotrópicos y pocos espacios de acompañamiento emocional accesibles para la población.
La incertidumbre constante sobre el futuro, los bajos ingresos, la imposibilidad de emigrar o reunirse con familiares, los apagones, el desabastecimiento y la violencia cotidiana generan un nivel de tensión permanente en la población.
Síntomas frecuentes de ansiedad y estrés:
Consejos para mitigar la ansiedad sin medicación:
La depresión está cada vez más presente, especialmente en personas mayores, jóvenes desempleados y madres cuidadoras. Las cifras reales no son claras, pero muchos expertos coinciden en que hay una epidemia de sufrimiento emocional no tratado.
Síntomas característicos de la depresión:
¿Qué se puede hacer en Cuba ante estos síntomas?:
Los niños y adolescentes han sido especialmente afectados por la inestabilidad emocional del entorno familiar, el cierre intermitente de escuelas, la escasez de materiales escolares, la presión migratoria y la falta de espacios seguros para el juego y la expresión.
Manifestaciones comunes en jóvenes:
Recomendaciones para cuidadores:
El sistema de salud mental en Cuba ha sufrido importantes retrocesos debido a la migración de profesionales, la falta de medicamentos como antidepresivos y ansiolíticos, y el colapso de las redes institucionales de apoyo.
Problemas más frecuentes:
Alternativas posibles:
Recursos comunitarios y de emergencia emocional
Aunque limitados, existen en Cuba y en el exterior algunas alternativas que pueden brindar ayuda emocional o primeros auxilios psicológicos:
Enfermedades comunes en niños, adolescentes y adultos mayores
En Cuba, distintos grupos etarios enfrentan enfermedades específicas que requieren una atención diferenciada. La infancia, la adolescencia y la vejez son etapas especialmente vulnerables cuando el sistema de salud no logra cubrir necesidades básicas, como ocurre en 2025. En esta sección analizamos los padecimientos más comunes según la edad, sus causas, síntomas y cómo prevenirlos o tratarlos con los recursos disponibles.
Los niños son uno de los grupos más afectados por el deterioro sanitario, la falta de vacunas, el hacinamiento y el acceso limitado a productos de higiene, alimentos y atención pediátrica.
Estas enfermedades como la gripe, el catarro común, la bronquitis y la neumonía son comunes durante todo el año, con picos en los cambios de estación.
Síntomas comunes:
Recomendaciones:
Frecuentes por el agua contaminada y la falta de higiene adecuada.
Síntomas:
Prevención:
Por dietas pobres en hierro y proteínas, muchos niños muestran signos de malnutrición.
Síntomas de alarma:
Consejos prácticos:
La adolescencia en Cuba en 2025 está marcada por incertidumbre, migración forzada, presión social y crisis de identidad. Además de problemas emocionales, hay enfermedades físicas frecuentes que muchas veces pasan desapercibidas.
Con el debilitamiento de los programas de educación sexual, muchas ITS han aumentado en jóvenes entre 15 y 25 años.
ITS más comunes:
Prevención:
Debido a la falta de productos dermatológicos y el estrés, los adolescentes presentan cuadros de acné inflamatorio que puede derivar en infecciones.
Recomendaciones:
Muchos adolescentes presentan insomnio, cambios de humor, fatiga crónica y desconexión emocional.
Consejos útiles:
Cuba es uno de los países más envejecidos de América Latina. Las personas mayores enfrentan múltiples condiciones crónicas, y muchas viven solas o con recursos muy limitados.
Causan dolor articular, rigidez y dificultad para caminar o cargar peso.
Cuidados básicos:
El Alzheimer y otras formas de deterioro mental aumentan, y muchas veces no son diagnosticadas ni atendidas.
Síntomas frecuentes:
Recomendaciones:
Muchas personas mayores experimentan pérdidas de orina que generan incomodidad y vergüenza.
Manejo práctico:
Ante la escasez de medicamentos, los problemas en el sistema sanitario y las condiciones sociales adversas que enfrenta la población cubana en 2025, la prevención se convierte en la herramienta más poderosa para proteger la salud. Prevenir no siempre requiere grandes recursos, sino conocimiento, organización y hábitos sostenibles. Esta sección ofrece medidas simples, prácticas y adaptadas a la realidad cubana para reducir el riesgo de enfermedades en el hogar y la comunidad.
Aunque la situación económica limita muchas opciones, aún es posible aplicar estrategias de prevención dentro del entorno doméstico para reducir la exposición a infecciones, parásitos y enfermedades crónicas.
Frente a la desinformación y la circulación de remedios peligrosos, la educación es clave para empoderar a la población. Aprender a identificar síntomas, actuar ante emergencias y evitar prácticas dañinas puede salvar vidas.
Aunque muchas veces difícil de mantener completo, un botiquín mínimo puede hacer la diferencia en una urgencia:
En Cuba, muchas personas enfrentan situaciones en las que presentan síntomas de enfermedades comunes, pero no tienen acceso inmediato a medicamentos ni a servicios médicos adecuados. La falta de antibióticos, antipiréticos, antihipertensivos y otros fármacos esenciales ha hecho que el manejo doméstico de los síntomas sea cada vez más frecuente. Esta sección ofrece una guía útil y segura sobre cómo actuar ante distintas dolencias cuando no se cuenta con recursos farmacológicos.
Advertencia: Estas recomendaciones están pensadas para aliviar síntomas leves o mientras se logra atención médica. No sustituyen la evaluación de un profesional.
Posibles causas:
Qué hacer sin medicamentos:
Qué no hacer:
Causas comunes:
Medidas caseras:
Recomendaciones sin medicamentos:
Importante:
Qué hacer sin antidiarreicos:
Cuándo buscar atención médica urgente:
Primeros auxilios sin medicamentos:
Evitar:
Alivio casero:
Recomendaciones:
Nota: Si se repiten con frecuencia, podrían indicar anemia, deshidratación o enfermedades más serias.
Técnicas caseras de apoyo:
Para facilitar la consulta rápida y ofrecer respuestas claras, hemos recopilado aquí una serie de preguntas frecuentes que muchas personas dentro y fuera de Cuba se hacen respecto al estado de salud en la isla en 2025, especialmente ante la escasez de recursos médicos.
Los más escasos suelen ser:
Antibióticos (amoxicilina, azitromicina, ciprofloxacina)
Antihipertensivos (enalapril, losartán, amlodipino)
Antidiabéticos (metformina, insulina)
Medicamentos psiquiátricos (clonazepam, fluoxetina)
Antialérgicos, antidiarreicos y antipiréticos
Algunas alternativas incluyen:
Intercambio con vecinos o familiares
Grupos comunitarios o religiosos
Envíos desde el exterior
Mercado informal (con precauciones por falsificaciones)
Toca la frente, pecho o cuello: si está caliente y hay sudoración, probablemente hay fiebre.
Observa si hay escalofríos, fatiga o ojos enrojecidos.
Usa compresas frías como medida inicial y vigila otros síntomas asociados.
Frutas cítricas (guayaba, toronja, limón)
Vegetales de hojas verdes (moringa, lechuga, acelga)
Caldos naturales y sopas con ajo y cebolla
Arroz, boniato, yuca: fáciles de digerir en enfermedades intestinales
Agua hervida y bebidas naturales sin azúcar
Sí, pero con precaución. Algunos que han mostrado efectividad como coadyuvantes:
Manzanilla: para dolores estomacales y estados nerviosos.
Ajo: propiedades antimicrobianas, útil en caldos y vapores.
Aloe vera: para quemaduras leves, picaduras o irritaciones.
Jengibre: para náuseas y resfriados.
Importante: No sustituir antibióticos ni tratamientos crónicos por infusiones sin indicación profesional.
Sí, pero hay restricciones:
Muchas veces faltan reactivos.
Puede haber demoras en la entrega de resultados.
Los exámenes más comunes (glucosa, orina, hemograma) aún se realizan en policlínicos, pero a veces solo con prioridad médica urgente.
Sí. Se recomienda:
Llevar suficientes dosis para toda la estadía.
Guardarlos en su empaque original, con el prospecto.
Llevar receta médica si se trata de medicamentos controlados.
Hacer una declaración aduanal clara si se lleva en grandes cantidades (por ejemplo, si se trata de una donación).
Sí, pero en clínicas internacionales, que funcionan en divisa:
En La Habana: Cira García, CIMEQ, Clínica Internacional La Pradera.
También hay servicios médicos en hoteles turísticos y aeropuertos.
Se recomienda viajar con seguro médico internacional válido en Cuba.
En 2025, la situación sanitaria en Cuba refleja una crisis profunda y prolongada, donde las enfermedades infecciosas y crónicas coexisten con severas limitaciones en el sistema de salud. La escasez de medicamentos, el deterioro de la infraestructura hospitalaria, la migración de profesionales y la falta de insumos básicos han hecho que el cuidado de la salud dependa cada vez más del conocimiento práctico, la organización comunitaria y la prevención cotidiana.
Las enfermedades más comunes —como el dengue, el virus del Oropouche, la hipertensión arterial, la diabetes, las infecciones respiratorias, gastrointestinales y los trastornos de salud mental— no son solo cifras médicas, sino realidades que afectan la vida diaria de millones de personas en la isla. Muchas de estas afecciones podrían evitarse o controlarse con acceso oportuno a tratamiento, pero mientras eso no esté garantizado, la prevención y la información son nuestras principales herramientas.
En este contexto, cuidarse a uno mismo y cuidar a los demás implica:
Nadie debería tener que enfrentar una enfermedad sin atención médica, pero en un país donde los recursos son tan limitados, ser proactivo, solidario e informado puede salvar vidas. Este artículo ha sido diseñado como una guía útil y realista para navegar las dificultades sanitarias de hoy, con la esperanza de que, desde lo individual y lo colectivo, podamos reducir riesgos y fortalecer la salud en tiempos difíciles.
TE RECOMENDAMOS:
En horas de la mañana de este miércoles, se produjo una caída total del Sistema…
Cada año, miles de cubanos llegan a Estados Unidos en busca de una vida más…
En los últimos años, Miami se ha consolidado como un epicentro clave para los negocios…
Un accidente natural de gran belleza y longitud situada a unos 2 km de la…
El transporte público es un aspecto fundamental para la vida diaria de los cubanos residentes…
La canasta familiar normada sigue siendo una deuda pendiente en Cuba. Los productos que la…