El reciente proyecto de ley aprobado en la Cámara de Representantes de EE.UU. propone un recorte sin precedentes al programa de asistencia alimentaria SNAP, conocido popularmente como “Food Stamps”.
Esta decisión no solo reduce en un 30% el presupuesto de ayuda, sino que excluye a refugiados, solicitantes de asilo y otras personas con estatus migratorios humanitarios del acceso a estos beneficios.
Para miles de cubanos que se encuentran en EE.UU. bajo programas como el parole humanitario, TPS o esperando una resolución de asilo, esto significa quedar fuera de una de las pocas redes de seguridad básicas disponibles.
Indice
¿Qué implica el recorte del SNAP?
El proyecto impulsado por legisladores republicanos representa una reducción de 300 mil millones de dólares hasta el año 2034. El objetivo declarado es reducir el gasto federal, pero a costa de programas que benefician directamente a comunidades vulnerables.
Según cálculos preliminares, los hogares con hijos perderán un promedio de $229 mensuales en ayuda alimentaria, mientras que la pérdida media general se estima en $254 por familia.
¿A quiénes afecta directamente?
Grupos migrantes excluidos del SNAP bajo esta nueva propuesta:
- Solicitantes de asilo en proceso
- Refugiados reconocidos
- Beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS)
- Personas con parole humanitario (como muchos cubanos llegados tras 2022)
- Víctimas de trata de personas
- Otros migrantes con estatus humanitarios temporales
Esto significa que miles de cubanos que llegaron recientemente y aún no tienen residencia permanente ni ciudadanía quedarían sin acceso a alimentos subsidiados.
¿Quiénes sí conservarían el acceso a los cupones?
Aunque el recorte es generalizado, se mantienen excepciones para:
- Adultos mayores de 65 años
- Personas con discapacidades permanentes
- Hogares con niños menores de 7 años
- Beneficiarios de TANF o SSI
Sin embargo, los requisitos laborales aumentarán para personas entre 55 y 64 años, y para hogares con hijos mayores de siete años. Incluso zonas con alto desempleo perderán las exenciones previas.
Una de las críticas más fuertes a esta medida es que, mientras se recortan fondos para alimentos, se incrementa el presupuesto para deportaciones:
- $110 mil millones se destinarán a ampliar la capacidad de detención de ICE.
- $90 mil millones adicionales serán usados para militarizar aún más la frontera.
Esto representa un cambio de prioridades drástico que pone en jaque a las comunidades migrantes, especialmente en estados como Florida y Texas, donde residen miles de cubanos.
Preguntas frecuentes (FAQ)
Si el proyecto de ley avanza en el Senado y es firmado por el presidente, los recortes comenzarían a implementarse progresivamente desde 2026 hasta 2034.
Debes consultar directamente con la oficina estatal del programa SNAP en tu lugar de residencia. Algunos estados podrían mantener ayudas temporales.
No, los residentes permanentes y ciudadanos estadounidenses no se verán excluidos por esta reforma, aunque sí podrían verse afectados por los nuevos requisitos laborales.
En la mayoría de los casos no, ya que la ley excluiría completamente ciertos estatus migratorios. No obstante, siempre puedes solicitar asistencia legal o apoyo de organizaciones comunitarias.
Algunas organizaciones sin fines de lucro, iglesias y bancos de alimentos locales ofrecen asistencia alimentaria gratuita. También se recomienda contactar al consulado cubano o redes de apoyo comunitarias.
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