A menos de 72 horas de saberse a Trump como presidente, en Estados Unidos comienzan a aplicar medidas legales para restringir los derechos de los inmigrantes que viven en esta nación del norte.
La para nada grata sorpresa, llegó este jueves, cuando un juez federal del estado de Texas anuló el conocido parole in place o programa ‘Keeping Families Together’ (“Manteniendo a las Familias Unidas”), el cual permitía obtener con facilidad la Green Card a los hijastros y esposas o maridos de ciudadanos estadounidenses.
Pero… ¿realmente está detrás de todo esto la mano del magnate y nuevo presidente Donald Trump? Veamos.
J. Campbell Barker es el juez federal del Tribunal de Distrito del Este de Texas que anuló el programa del parole in place. Este juez, republicano, llegó al cargo bajo el anterior mandato presidencial de Trump, nombrado personalmente por él.
‘Keeping Families Together’ había sido aprobado en junio pasado, por orden del entonces presidente Joe Biden, pues consideraba que “estas parejas han pasado años en el país, criando a sus hijos y pagando impuestos”, una clara consideración hacia el aporte que brindan los migrantes a Estados Unidos.
Sin embargo, desde su aprobación apareció la posición reactiva de 16 estados dominados por republicanos. El grupo America Firs Legal, formado por Alabama, Arkansas, Florida, Georgia, Idaho, Iowa, Kansas, Louisiana, Dakota del norte, Ohio, Carolina del sur, Dakota del sur, Tennessee, Texas y Wyoming formularon una demanda legal pues consideraban que la decisión de Biden iba en contra del Congreso y los canales de normalización legal.
Además, apuntaban, 550 mil personas que podían beneficiarse del parole in place significarían un notable incremento del gasto público, debido a los servicios de atención médica, educación y aplicación a la ley, con gastos millonarios. Como si esas personas no llevasen años viviendo en Estados Unidos y necesitando de esos servicios vitales, que constituyen derechos humanos.
La puja contra el parole in place ya venía en desarrollo desde agosto, cuando el propio juez federal J. Campbell Barker logró un fallo a favor de la suspensión del programa en el estado de Texas.
Ahora, para su anulación total, el juez preparó un informe de 74 páginas en donde exponía las razones para tomar la decisión. Por ejemplo, asegura que el Gobierno de turno sobrepasó sus funciones al aplicar la normativa por encima de la ley de inmigración “más allá de su punto de ruptura”.
Además, aseguró que tras la llegada de Trump al poder era inminente que se tomaran decisiones como estas, una clara muestra del interés del juez federal por congraciarse con el poder. La anulación va en correspondencia a las misivas planteadas por el nuevo presidente durante sus mítines electorales: “deportaciones masivas de inmigrantes”.
Mientras tanto, la solución fue celebrada por el grupo de los 16 estados. Desde su cuenta oficial en la red social X exponen: “Acabamos de GANAR nuestra demanda junto con Ken Paxton, Raúl Labrador y una coalición de 14 estados. Hemos DETENIDO oficialmente el intento ilegal de la administración Biden-Harris de conceder una amnistía masiva a cientos de miles de extranjeros ilegales”.
Sin dudas, un duro golpe para los cientos de miles de familias que vieron la oportunidad de regularizar por fin su estancia en la nación, y ahora se le deshace de las manos, a medida que el rojo republicano asciende en la política.
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