Autoridades agrícolas de una central provincia cubana informaron recientemente como se ha comportado la producción de papa en el territorio.
Según la información oficial, las autoridades de la provincia reconocieron incumplimiento de la cosecha de papa, lo que se tradujo en miles de toneladas perdidas, pues no pudieron aprovecharse.
La situación se dio en la provincia de Ciego de Ávila, según reportes de la prensa local que hablan de cantidad por debajo de las 17.869 toneladas proyectadas.
La cifra de pérdida está en más de 5.500 toneladas, y según se informó, en ello incidieron factores naturales como las afectaciones climatológicas y la carencia de recursos como el herbicida post-emergente.
El especialista de la Delegación Provincial de la Agricultura Raúl Monguía Rodríguez, explicó que las altas temperaturas provocaron afectaciones fisiológicas al cultivo, y las lluvias también interrumpieron la cosecha entre 6 y 10 días en varias zonas.
El directivo precisó que específicamente unas 5.535 toneladas no se pudieron aprovechar, por los niveles de pudrición, lo que representa entre el 25 y 30 por ciento de lo programado a cosechar.
La campaña de siembra alcanzó unas 950 hectáreas, de las cuales 210 se cubrieron con variedades de semillas cubanas, tratadas con fertilizante de fórmula completa (nitrógeno-fósforo-potasio) y el herbicida pre-emergente.
Los referidos productos actúan como controladores de la maleza en los inicios del ciclo de vida de la planta, se empleó además la urea para completar los niveles de nitrógeno que demanda la papa.
Monguía Rodríguez también se refirió a la falta de herbicida post-emergente, el cual actúa en la eliminación de hierbas indeseables que limitan el efecto de los fertilizantes y afectan la calidad de los procesos fitosanitarios pues impiden que lleguen totalmente los productos al cultivo.
Durante el mes de abril se reportaron temperaturas que alcanzaron hasta los 34 grados Celsius, no muy comunes en ese mes, según el Centro Provincial de Meteorología, e incluso lluvias y la ocurrencia de tormentas eléctricas, también atípicas para la etapa.
La cosecha de papa tiene como destino el consumo nacional, una parte se emplea como semilla de la siguiente campaña, y la Empresa Agroindustrial Ceballos elabora además las papas prefritas dirigidas a la exportación.
En Ciego de Ávila se distribuyeron 12.6 libras de papa por persona y otros compromisos también se asumieron con Las Tunas, Camagüey, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo.
Las hectáreas de papa sembradas en la pasada campaña fueron menores en 170 a la precedente, y el pronóstico de rendimiento fue de 19 toneladas por hectárea, aunque solo se quedó en 9,8 aproximadamente.
El territorio se propuso inicialmente dejar unas 1.540 toneladas para semilla, de las variedades Atlas, Manitou, Romano y Alquete, para plantar en unas 300 hectáreas.
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