La corrupción, los delitos y las ilegalidades, son males que corroen los cimientos de la economía cubana. En tiempos de crisis aguda se afianzan y se convierten en tendencia en buena parte de la sociedad, incluyendo los peldaños más altos de la escalera gubernamental del país.
Alarmantes fueron las recientes destituciones del Ministro de Economía Alejandro Gil Fernández y el Viceprimer Ministro Jorge Luis Perdomo Di Lella, por “errores graves” en el desempeño de sus funciones. La cúpula política de la isla no ha ofrecido más detalles sobre estos casos de corrupción, pero el pueblo hace sus versiones de la historia.
Si eso sucede a lo macro, a ese alto nivel, nadie piense que los eslabones más pequeños de la cadena están “limpios”. Durante el año que recién finalizó se hicieron en Cuba alrededor de 2 mil auditorias y les podemos asegurar que debajo del tapete había bastante polvo.
Indice
¿Qué examinó la Contraloría General de la República?
En 2024 el Sistema Nacional de Auditoría y la Contraloría General de la República (CGR) llevaron a cabo casi 3 mil acciones de prevención y control, destacándose 1996 auditorías.
Darlam Dalmau Palomino, vicecontralor general del país, informó a medios de prensa nacionales que el equipo de trabajo involucrado en esas acciones de control y fiscalización se sometió a una estricta preparación en temas jurídicos y económicos.
Fueron objeto de supervisión los gastos públicos, liquidación del presupuesto del año anterior, estrategias de desarrollo territorial y la atención a grupos vulnerables.
El especialista precisó que “las auditorías buscaron verificar el cumplimiento de leyes como la del Presupuesto del Estado y el Sistema Tributario, así como las relaciones entre el sector estatal y las nuevas formas de gestión no estatal”.
En algunas entidades se muestran avances en el cumplimiento de sus obligaciones, pero en otras los directivos han asumido actitudes justificativas ante la detección de problemas e irregularidades.
Corrupción a la vista en Cuba
Teniendo en cuenta los resultados de esas revisiones, llevadas a cabo por parte de CGR y el Sistema Nacional de Auditoría, fue preciso aplicar medidas disciplinarias en más del 70 por ciento de los casos. Personal designado, funcionarios y directivos a diferentes niveles, fueron los involucrados.
Por la gravedad de las fallas detectadas en algunas auditorías, se separaron y demovieron de sus cargos a un número importante de funcionarios públicos. Ante la sospecha de presuntos delitos se solicitó a la Fiscalía y el Ministerio del Interior la realización de auditorías forenses para posibles procesos penales.
El vicecontralor refirió que las mayores irregularidades detectadas están relacionadas con facturas falsas, manipulación de efectivo, contratos fraudulentos e inventarios de recursos materiales.
Las quejas emanadas por parte de la población también fueron investigadas y un alto porcentaje concluyeron Con Razón o Con Razón en Parte, lo que significa que todavía hay mucha vulnerabilidad en la atención ciudadana.
Comprobación Nacional al Control Interno
Un total de 169 entidades fueron objeto de revisión durante la XVI Comprobación Nacional al Control Interno. Dalmau Palomino precisó que se concentró en algunos sectores estratégicos para la economía nacional, como por ejemplo el turismo.
La CGR prioriza las acciones de prevención pero también el enfrentamiento, para ello realiza controles recurrentes en las empresas y entidades con auditores internos de base y equipos multidisciplinarios.
Resaltaron como un aspecto de avance la rendición de cuenta administrativa a los trabajadores. Este proceso está instaurado por la Central de Trabajadores de Cuba desde abril de 2024, mediante la Resolución 146.
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