El panorama epidemiológico en Cuba se está complejizando dado el incremento de casos de hepatitis A, que en este último mes del año ha activado las alertas en todas las instituciones sanitarias del país.
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Hepatitis A: una amenaza ciudadana en Cuba
Recientemente el director nacional de Higiene y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública -Francisco Durán García- informó desde los medios oficiales de comunicación, la necesidad extrema de implementar medidas de higiene frente a este contexto de enfermedades.
De acuerdo a la tasa general de incidencia aún se mantienen circulando algunas afecciones de arbovirus como es el caso del oropouche, que está presente actualmente en las 15 provincias del país, además del dengue, que se mantiene presente en 13 territorios.
Independientemente de ello, informa el Dr. Durán, que estas enfermedades se mantienen “en control, con un número limitado de casos que no ha generado gravedad o situaciones críticas”. Sin embargo, la presencia de hepatitis A y otras afectaciones diarreicas, suponen un riesgo importante para la salud poblacional.
En torno a ello, alertó sobre el incremento de los casos, que normalmente presentan un carácter de transmisión hídrica y digestiva, pues el consumo de agua contaminada con heces fecales de personas ya infectadas, es lo que desencadena el contagio masivo a partir de la aparición de síntomas diarreicos.
Se trata de una enfermedad viral que como síntomas principales incluye fatiga, dolor abdominal, náuseas, malestar general, ictericia (color amarillento de la piel y mucosas de los ojos), pérdida del apetito, y en algunos casos también puede provocar fiebre.
Medidas preventivas para la Hepatitis A y enfermedades diarreicas
El Dr. Francisco Durán García resalta la importancia de cuidar la higiene personal y colectiva, puesto que es una enfermedad de transmisión fecal-oral, que puede agravar la situación clínica de algunos pacientes, y evitar su propagación resulta en estos momentos una tarea de primer orden.
Dentro de las acciones que instó a implementar en la sociedad se encuentran las siguientes:
- Extremar la higiene y conservación de los alimentos, así como proceder a la cocción adecuada de estos.
- Potenciar la calidad del agua para consumo humano, por lo que se aconseja hervirla y añadir el porcentaje de hipoclorito de sodio, sobre lo cual precisó que se trabaja para poner a disposición poblacional el hipoclorito de sodio al 1 por ciento por un precio módico y asequible, en toda la red de farmacias del país.
- No consumir alimentos contaminados o con déficit de labores de higienización previa.
- Fomentar el lavado continuo de las manos.
- Mantener la limpieza de las superficies y artículos a partir del uso de soluciones cloradas.
- Evitar el fecalismo al aire.
- Garantizar en lo posible el saneamiento de las ciudades, sobre todo en las áreas de mayor concentración y circulación de personas.
- Mantener los recipientes de desechos sólidos tapados correctamente, además de establecer un control frecuente sobre los vectores, tales como insectos o cucarachas.
Estas medidas informadas por el director nacional de Higiene y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, no solamente dependen de la responsabilidad ciudadana colectiva, sino también de las entidades involucradas directamente en las tareas de saneamiento a nivel local y comunitario.
Esto podría ser uno de los principales factores desencadenantes de la viralización de enfermedades de este tipo, y para lo que se requiere la implementación de otras medidas de cumplimiento a nivel institucional.
Por otra parte, también se puntualizó que el país continúa llevando a cabo una campaña de vacunación contra el neumococo para niños de 2 años de edad, y se espera avanzar en un 95 por ciento de cumplimiento preventivo para los días finales de este 2024.
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