El domingo pasado el Senado de los Estados Unidos aprobó un paquete económico a fin de enfrentar el cambio climático y la inflación, que espera su reafirmación próximamente en la Cámara de Representantes.
La llamada Ley de Reducción de la Inflación de 2022 fue aprobada por mayoría simple en votación e incluye numerosas prioridades para el Partido Demócrata.
Ya en camino a su revisión por la Cámara de Representantes, el paquete está muy cerca de convertirse en ley efectiva.
El principal objetivo de la nueva medida, según explicó el propio presidente Biden, es la reconstrucción de los sistemas de apoyo familiar, la infraestructura pública y la reducción del déficit.
Para ello se había pensado una cifra superior, pero la normativa que pasó el Senado este domingo asciende a 740 mil millones dólares.
Parte de la inversión (sobre los 375 mil millones de dólares) será usada para enfrentar al cambio climático mientras que otros 300 mil millones se utilizarán para pagar el déficit fiscal.
Ayudará además a potenciar el Medicare y reducir costos en gasolineras, a la vez que creará nuevos empleos, señaló Biden.
Anteriormente habíamos comentado que los republicanos pretendían presentar un grupo de medidas antiinmigrantes para descarrilar la presente Ley y que bastaría con solo un voto a su favor para echar por tierra todos los acuerdos alcanzados.
Sin embargo, pese a su intento de evitar que se apruebe, este paquete de medidas para hacer frente a la inflación salió adelante en el Senado. Pero ¿En qué consiste? veamos.
Indice
Durante el periodo de pico pandémico se otorgaron subsidios a estadounidenses a fin de permitirles comprar seguros médicos por su cuenta.
Esta ayuda habría de expirar durante 2022 pero con la nueva medida a aprobar próximamente por la Cámara de Representantes, se extendería durante tres años más.
Además, la prima de seguros para quienes las adquieran de esa forma se reducirá en $800.
Por otra parte, los beneficiarios del programa Medicare, sobre todo los adultos mayores, recibirán ventajas una vez que la ley sea aplicada.
Medicare podría así negociar los precios de los medicamentos recetados con las farmacéuticas y de esa forma ahorrar al presupuesto del Estado unos 288 mil millones de dólares durante los próximos diez años.
De esa manera será posible reducir los gastos de los ancianos por cuestión de medicamentos, con un límite de $2000 dólares en gastos personales dedicados a medicinas.
Además, se impondría un límite de 35 dólares por dosis de insulina a los ancianos y se les brindaría acceso gratuito a diversas vacunas.
Una vez firmada la ley por Biden, la medida permitiría una inversión de casi 375 mil millones de dólares para combatir al cambio climático.
Además, con el impulso, la producción de energías renovables, sería posible crear nuevos puestos laborales e incluso potenciar la compra de vehículos eléctricos con créditos fiscales de 4000 y 7500 para los consumidores que los adquieran usados y nuevos respectivamente.
Algunas cifras del documento de 755 páginas señalan que 60 mil millones serían dedicados a la producción de energías limpias mientras que otros 30 mil millones a potenciar la industria solar y eólica.
Se espera también limitar las emisiones de metano derivadas de perforaciones de petróleo y gas, con una estrategia que podría reducir este tipo de emisiones de efecto invernadero en un 40% para inicios de la década venidera.
Igualmente, otros 4 mil millones estarían dedicados a combatir la sequía en el oeste del país.
Para disminuir el déficit fiscal se destinarían unos 300 mil millones de dólares, luego de que este se elevara durante el periodo de pandemia de Covid-19.
Esto es especialmente necesario pues los gastos fiscales se incrementaron en proporción inversa a los ingresos fiscales.
Con la nueva medida se espera disminuir tal impacto después de varias alzas y caídas del déficit fiscal durante 2022.
Para financiar semejante proyecto de inversiones se impondrá un nuevo impuesto mínimo del 15% a las compañías con ganancias superiores a los 1000 millones de dólares durante un año fiscal.
Este impuesto, que iniciaría al concluir el año fiscal 2022, espera recaudar más de 258 mil millones de dólares de cerca de 200 empresas estadounidenses que evitan pagos de impuestos corporativos.
Se cuenta también con recaudar 203 mil millones dólares a través de las acciones del Servicio Interno de Impuestos del Departamento del Tesoro de Estados Unidos para atrapar evasores fiscales.
No obstante, y como parte de la promesa de Biden, los aumentos de impuestos no afectarán a las empresas y familias que generen menos de 400 mil dólares al año.
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