Este jueves, durante la tercera jornada de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular en Cuba (ANPP) se dieron a conocer los datos del Informe de la Industria Agroalimentaria, cuyas evidencias demuestran que todas las medidas implementadas para conseguir la soberanía alimentaria y altos niveles de producción, no han tenido resultados debidamente satisfactorios.
Ramón Aguilar, presidente de la Comisión Permanente Agroalimentaria, develó cómo se han manifestado los diferentes sectores de la industria cubana de los alimentos, así como las causas que provocan el déficit productivo que se vive en el país.
Entre los motivos por los cuales la producción se ha visto afectada, se encuentran, la obsolescencia técnica de la inmensa mayoría de los equipos, la falta de materias primas para la producción, los bajos salarios de los trabajadores de este sector y la falta de control sobre las empresas y entidades encargadas de la producción de alimentos.
De igual forma, se dio a conocer que la reciente Ley de Pesca no ha logrado implementar orden ni legalidad, como tampoco ha promovido mejoras en los resultados de la producción pesquera. Aunque se capacitaron con ella más de 12 mil 700 pescadores, aún hay dificultades para explotar debidamente los embalses, y no se logra vincular a más pescadores privados a las empresas estatales, como tampoco completar las plantillas de estas ni mejorar las condiciones laborales y de vida de quienes se dedican a la pesca.
De 214 toneladas pescadas este año, las empresas estatales solo han podido comprar 104 de ellas.
Asimismo, no se alcanzan suficientes niveles de certificación en la política de producción industrial de bebidas y alimentos.
En cuanto a la leche, en el pasado año 2023 no se logró cumplir ni con el 50% de los consumidores de la canasta básica, que son, en esencia, niños menores de 7 años. Este año solo se ha logrado comprar el 84% del potencial producido.
En cuanto a la carne, se afirma que hasta el cierre de marzo se había entregado el 50% de las toneladas de carne vacuna previstas, pero igualmente sólo había podido accederse al 83% del potencial producido.
Por último, se habló del pan de la canasta básica, que ha tenido que producirse con harinas alternativas, de yuca, boniato y calabaza, con lo cual aseguran tener “resultados positivos” en provincias como La Habana, Holguín y Santiago de Cuba.
El informe presentado por el Ministerio también recoge el comportamiento de las principales producciones hasta marzo:
En el caso de la harina de trigo, el plan se cumple al 44%, dejándose de producir 36 000 toneladas. En comparación con el mismo período del 2023, se registra una disminución de 27 785 toneladas.
La producción de soya beneficiada no ha tenido lugar este año, lo que representa una disminución de 3 520 toneladas respecto al 2023 y afecta la producción de yogur de soya, con una reducción de 10 000 toneladas.
La carne de res deshuesada cumple el plan al 47%, con una reducción de 1 569 toneladas. Comparado con el 2023, hay una disminución de 800 toneladas, impactando negativamente las entregas de carne de res para niños y dietas.
En cuanto a la carne en conserva, el plan se cumple al 71%, dejando de producir 2 238 toneladas. Este sector decrece en 6 685 toneladas debido al déficit de harina de trigo y MDM.
La producción de café cumple el plan al 58%, con una disminución de 1 217 toneladas. Esto se debe al incumplimiento de las entregas por parte de la agricultura, resultando en una reducción de 1 530 toneladas en comparación con el año anterior.
La producción de croquetas ha crecido, alcanzando 1 091 toneladas, lo que representa un aumento de 547 toneladas respecto al 2023, gracias a la adquisición de materias primas de las FGNE.
Las bebidas alcohólicas nacionales cumplen el plan al 82%, con una producción de 8 800 hectolitros menos, aunque se registra un incremento de 39 813 hectolitros en comparación con el año anterior.
La producción de refrescos cumple el plan al 76%, dejándose de producir 91 hectolitros, pero aumentando en 179 159 hectolitros en relación con el año anterior.
La captura bruta de pescado se cumple al 56%, con 1 346 toneladas menos que el plan, debido en parte a la falta de combustibles. En comparación con el año anterior, se registra una disminución de 1 310 toneladas.
En acuicultura, el plan se cumple al 69%, con una producción de 456 toneladas menos. Esto representa una disminución de 153 toneladas en comparación con el mismo período del año anterior.
La producción de helados cumple el plan al 57%, dejándose de producir 497 galones. Este incumplimiento se debe al déficit de azúcar, leche en polvo y grasa vegetal, resultando en una disminución de 949 galones respecto al año anterior.
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