El Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DOJ) solicitó una autorización para remover la barrera alambrada en Texas.
Se trata de una solicitud de emergencia del DOJ a la corte suprema que anule la decisión de un tribunal federal de apelaciones que prohíbe a los agentes cortar los alambres de la barrera instalada por Texas en la frontera con México.
Este hecho se suma a los consecutivos desacuerdos entre el gobierno de Biden y el gobernador de Texas Greg Abbott sobre el tema de la política migratoria.
Por un lado, Abbot impulsa medidas como el traslado de miles de migrantes en autobuses a ciudades santuario y promueve la mantención de esta barrera colocada en Eagle Pass, cerca del río Bravo para impedir el paso de los migrantes.
Por el otro, el gobierno muestra su desacuerdo con las decisiones de Texas y continúa buscando recursos para impedir que se mantengan establecidas.
En octubre pasado Texas presentó una acusación contra el gobierno por invadir y dañar su propiedad estatal.
Los agentes federales habían cortado cerca de 50 kilómetros de alambrada extendida en terrenos públicos y privados dentro de la región y por lo cual fueron demandados.
En noviembre una jueza falló a favor de la Patrulla Fronteriza al no encontrar suficiente evidencia de estas violaciones, aunque cuestionó el hecho de que permitieran ingresar por esas zonas cortadas a los inmigrantes, en vez de conducirlos a una aduana para su procesamiento.
Luego en diciembre Texas apeló a la decisión y la decisión de la jueza fue anulada: los agentes no podrían cortar más la alambrada en lo adelante con excepción de situaciones médicas de emergencia.
El DOJ dijo ahora en su solicitud que la anulación previa supone graves consecuencias para el trabajo de los agentes y al mismo tiempo justifica la petición al supremo.
…la orden judicial prohíbe a los agentes atravesar o mover obstáculos físicos levantados por el Estado que impiden el acceso a la misma frontera que están encargados de patrullar y a las personas que deben detener e inspeccionar.
dijo el Departamento de Justicia de los Estados Unidos.
Alegó, además, que con el impedimento no podrían evitar situaciones mortales como los riesgos graves de ahogamiento y las muertes por hipotermia o por exposición al calor”.
Entre demanda y contra demanda continúan el gobierno de Biden y Texas y mientras tanto los migrantes continúan experimentando peligros en sus ansias por conquistar un futuro mejor.
Cerca de 235 mil personas fueron detenidas en los primeros 28 días de diciembre en la frontera con México, según datos de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
Esa cifra indica que la crisis migratoria continúa más allá de cualquier medida implementada a nivel estatal o de país, a favor o en contra de la migración hacia los Estados Unidos.
Mientras se espera el resultado de la petición se anuncia que el gobierno reabrirá en breve 4 puntos de entrada en la frontera con México, fruto de la reciente reunión diplomática que abordó este tema en territorio mexicano.
Estos puntos se localizan en Eagle Pass, San Ysidro, Lukeville y Nogales, sitios cerrados por la llegada masiva de migrantes y el consecutivo traslado de recursos y personal a otros sitios que mostraban mayor flujo de entrada.
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