
Autos clásicos americanos
Los Autos clásicos americanos son uno de los mayores atractivos de los que visitan la Isla de Cuba y fundamentalmente su Capital, La Habana. Para los aficionados de los autos antiguos es un placer situarse en una plaza cercana a una arteria principal y ver pasar ante sus ojos un desfile de antigüedades, un museo andante de variedades, modelos y colores.
Una gran variedad de autos antiguos americanos son protagonistas principales del transporte público. Estos vehículos nacidos a comienzo de la segunda mitad del siglo pasado con motores de seis cilindros o V8, en la actualidad corren por las calles de la Isla grande con motores y accesorios de otros tipos de vehículos. También puede visitar el Museo del Automóvil, o el Museo Nacional del Transporte.
Conocidos como almendrones los autos clásicos americanos pueden encontrarse en cualquier sitio de la Habana Vieja, frente al Capitolio Nacional, el Parque Central, viajando por todo El Vedado, Marianao, la Avenida Rancho Boyeros o la hermosa Quinta Avenida, hacen viajes regulares de pasajeros entre municipios, estos generalmente son los Chevrolet del 1953 y 1954, aunque existen otros más antiguos que aún funcionan.
Los más elegantes fabricados entre 1955 y 1957, algunos de ellos descapotables, son utilizados para prestar servicios a turistas extranjeros, bodas, quinces y otras actividades elegantes como el Desfile de Chanel; estos pueden ser encontrados cerca del Hotel Nacional, el Gran Teatro de La Habana, los hoteles Meliá Cohíba y Meliá Habana.
Atraídos por estos hermosos autos se rodaron en el Malecón habanero escenas de la octava parte de la película Rápido y furioso.
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