Una jueza federal de Massachusetts ha emitido una orden que podría cambiar el rumbo de la política migratoria de Estados Unidos: el gobierno de Donald Trump deberá reanudar de inmediato los trámites migratorios de miles de personas beneficiadas por el programa de parole humanitario, entre ellos miles de cubanos.
Esta decisión llega como respuesta a una demanda colectiva y representa un duro revés para los intentos del expresidente de cancelar las medidas migratorias impulsadas durante el mandato de Joe Biden.
Indice
El parole humanitario es un programa migratorio que permite la entrada temporal a EE.UU. por razones urgentes o de interés público. Bajo la administración Biden, se habilitaron procesos especiales para ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, con la condición de contar con un patrocinador en EE.UU.
Sin embargo, tras su retorno al poder, Trump emitió una orden ejecutiva el 20 de enero de 2025 para eliminar todos los programas de parole creados durante el gobierno anterior, como parte de su política de endurecimiento migratorio. Su administración argumentaba que tenía amplias facultades para hacerlo sin necesidad de revisión judicial.
La jueza Indira Talwani, designada por el expresidente Barack Obama, no estuvo de acuerdo con esa interpretación. En su fallo, dejó claro que el gobierno no puede suspender los programas de forma masiva y automática sin cumplir con los procedimientos establecidos por la ley federal.
No es de interés público crear una situación donde cientos de miles de personas queden ilegalmente en el país y sin posibilidad de trabajar.
escribió Talwani en su orden judicial.
Además, certificó una clase a nivel nacional que protege de forma temporal a todos los solicitantes bajo el programa de parole mientras el caso se resuelve, lo cual incluye migrantes cubanos, muchos de los cuales ya viven en Estados Unidos bajo permisos temporales.
Los más beneficiados por esta decisión judicial son:
La medida también ofrece alivio a miles de cubanos en EE.UU. que esperaban poder traer legalmente a sus familiares bajo este programa.
Aunque la administración Trump ha llevado el caso a la Corte Suprema, por ahora debe reactivar todos los procesos pendientes del parole humanitario. Esto incluye permitir nuevas aplicaciones y renovar permisos vencidos.
Organizaciones como Human Rights First celebraron el fallo, afirmando que “reafirma la obligación legal del gobierno de respetar los derechos de los beneficiarios del parole y de las comunidades que los han acogido”.
Es un permiso temporal otorgado por razones humanitarias urgentes o de beneficio público. No es un estatus migratorio permanente, pero permite vivir y trabajar legalmente en EE.UU. por un tiempo limitado.
Los cubanos con familiares en proceso de parole podrán retomar sus trámites. También se evitan expiraciones masivas de permisos de trabajo.
La administración Trump apeló la decisión y pidió a la Corte Suprema que determine si puede eliminar programas de parole sin revisión judicial.
Se estima que cientos de miles de personas, incluyendo más de 500,000 migrantes de los países involucrados, estarán cubiertas por la orden judicial.
La orden obliga al gobierno a reactivar los trámites pendientes, pero aún no está claro si se aceptarán nuevas solicitudes mientras el caso esté en proceso. Se recomienda consultar a un abogado de inmigración.
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