Todavía es fresca la Copa América de Fútbol en la memoria de los amantes del más universal de los deportes. Para muchos todavía es una incertidumbre los sucesos ocurridos estadio afuera en la final entre Argentina y Colombia.
Pero ¿Qué sucedió en realidad con el presidente colombiano de la Federación de Fútbol? Tendrás todos los detalles si lees este artículo hasta el final.
Todo el que esperaba ver el juego final de la Copa América de fútbol el pasado domingo a partir de las 8:00 de la noche tuvo que esperar casi una hora después debido a sucesos violentos que se originaron a la entrada del estadio Hard Rock de Miami.
Según precisan las fuentes oficiales más de veinte personas fueron arrestadas por violentar la entrada al juego final de ese evento deportivo. Sin dudas el nombre más llamativo dentro de los arrestados resultó el del presidente de la Federación de Fútbol de Colombia, Ramón Jesurún.
Las propias fuentes han revelado que junto al alto funcionario deportivo colombiano quien además funge como vicepresidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Comebol), fue detenido su hijo Ramón Jamil Jesurún.
La detención se produjo en horas de la madrugada del lunes y los llevaron hasta un centro penal (Prisión Turner Guilford), ubicado en el Condado de Miami Dade; ambos detenidos fueron acusados de agredir a funcionarios del orden.
En las últimas horas ha trascendido que ambos fueron liberados tras pagar una fianza y han realizado declaraciones sobre lo acontecido en la noche del domingo en el Hard Rock.
El principal dirigente del fútbol colombiano manifestó que “sentía mucho lo sucedido y que contrario a algunos comentarios él no agredió a ningún oficial”.
Y continuó diciendo que “en la confusión al terminar el juego Colombia – Argentina pedí a los oficiales (previa identificación) que me dejaran pasar a la premiación y al no permitirlo hubo un forcejeo entre mi hijo, los guardias y yo”.
Algo catalogado por el propio Jesurún como “grotesco, indebido y que no debió ocurrir, al tiempo llamó a investigar a fondo los hechos donde hubo hasta niños perjudicados por el caos creado”.
Por lo pronto, continuarán las investigaciones de los hechos pues tanto el presidente de la Federación de Fútbol de Colombia como su hijo están en libertad bajo fianza.
Lo cierto es que el cierre de la competición se vio empañada por los hechos antes de su inicio cuando un grupo de personas sin ticket de entrada ingresaron a la fuerza por disímiles lugares donde fueron detenidos más veinte aficionados y un total de 55 fueron expulsados de la sede del juego.
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