En un poco común acontecimiento, el Hospital Materno “Mariana Grajales” de Villa Clara, Cuba, ha sido el escenario de un parto de trillizos, el primero en cuatro años. Este evento no solo ha llenado de alegría a la familia de los recién nacidos, sino que también ha capturado la atención de la comunidad médica y la población local.
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Aracelys Fleites León, una especialista en Ginecobstetricia, y su esposo Yosami Álvarez Mora, un trabajador agrícola, habían esperado durante quince años para poder experimentar la dicha de ser padres.
Tras múltiples intentos fallidos y tratamientos de fertilidad, la pareja finalmente logró concebir gracias a un procedimiento realizado en la clínica IREGA en Acapulco, México. La noticia del embarazo fue recibida con una inmensa alegría, especialmente después de tantos años de esfuerzo y esperanza.
Durante el embarazo, Aracelys recibió un cuidado prenatal meticuloso en el Hospital “Mariana Grajales”. Este proceso incluyó la atención de varios especialistas debido a la diabetes gestacional que desarrolló.
Los bebés, nombrados Alicia, José Miguel y José Antonio, nacieron el 25 de julio con 32.6 semanas de gestación. A pesar de ser prematuros, los tres se encuentran en buenas condiciones de salud y recibirán el alta médica una vez que alcancen los 2500 gramos de peso.
La importancia de este parto se destaca aún más en el contexto de la actual crisis económica en Cuba, que ha afectado significativamente los recursos médicos y las capacidades de tratamiento de infertilidad en el país.
La necesidad de viajar a México para someterse al tratamiento subraya las dificultades que enfrentan muchas parejas cubanas en su búsqueda de tener hijos.
Actualmente, los trillizos se encuentran bajo la cuidadosa vigilancia del servicio de Neonatología del hospital, donde se monitoriza su evolución. Los especialistas confirman que los bebés están evolucionando favorablemente y se espera que pronto puedan ir a casa con sus padres.
El nacimiento de estos trillizos ha sido una bendición no solo para la familia Álvarez Fleites, sino también para toda la comunidad de Villa Clara. Este evento ha traído esperanza y alegría en un momento de desafíos, destacando la dedicación y el esfuerzo del personal médico del Hospital “Mariana Grajales”.
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