La temporada de huracanes 2025 ya tiene su primer protagonista: la tormenta tropical Andrea. Formada en aguas del Atlántico norte este 24 de junio, Andrea inaugura oficialmente el ciclo de vigilancia meteorológica para la región.
Aunque su nombre pueda despertar inquietudes, sobre todo entre los cubanos acostumbrados a veranos intensos y meteorología activa, los expertos aseguran que por ahora no representa una amenaza directa para Cuba.
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Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), Andrea se organizó rápidamente en una zona subtropical del Atlántico occidental. Se localiza a varios cientos de kilómetros al noreste de las Bahamas, desplazándose hacia el noreste a una velocidad promedio de 24 km/h.
De acuerdo con las proyecciones más recientes, Andrea seguirá una trayectoria oceánica, alejándose de zonas habitadas, y se espera que se debilite gradualmente en los próximos días.
La buena noticia es que Andrea no impactará directamente a Cuba ni al sur de Florida. Meteorólogos de medios como Radio Reloj y Cuba en Miami han recalcado que, aunque es importante mantener la vigilancia, no hay señales de que el fenómeno se desvíe hacia el Caribe.
Esto no significa que se pueda bajar la guardia. Como recuerdan los especialistas del Instituto de Meteorología de Cuba, el inicio de una tormenta tropical temprana puede anticipar una temporada más activa de lo normal, en línea con los pronósticos de NOAA que advierten una posible temporada “hiperactiva”.
Expertos consultados por CNN en Español y la agencia EFE coinciden en que el patrón climático actual —incluido el desarrollo temprano de tormentas— se ve influenciado por condiciones como:
Estas condiciones aumentan la probabilidad de que en las próximas semanas surjan sistemas con mayor potencial ciclónico. Por ello, el llamado general es a mantenerse informados, preparar planes de emergencia y no confiarse por la lejanía de Andrea.
Aunque la tormenta ha sido nombrada y monitoreada por medios como Telemundo 51, no se esperan efectos directos en la península de Florida, ni en ciudades con alta población cubana como Miami o Tampa. Sin embargo, se recomienda precaución en actividades marítimas debido al oleaje y los vientos en alta mar.
Aunque Andrea no tocará tierra ni amenaza a Cuba, su formación es un recordatorio claro para:
No. Según los modelos actuales, Andrea se aleja del Caribe y se debilitará en aguas abiertas del Atlántico.
Sí, aunque no es frecuente. La formación temprana puede indicar una temporada más activa, pero no siempre implica más huracanes peligrosos.
El próximo nombre en la lista del Atlántico es Barry.
NOAA ha pronosticado entre 17 y 25 tormentas con nombre, lo que supera el promedio habitual.
Revisar tus planes de emergencia, seguir medios oficiales y tener suministros básicos listos. La prevención es clave.
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