Esta madrugada el Oriente de Cuba fue sacudido por un sismo de 6.1 grados en la escala de Ritcher, generando preocupación en los ciudadanos debido a la hora en la que ocurrió el fenómeno.
Hace poco más de un mes, el pasado mes de noviembre, también se experimentaron dos sismos similares en la región oriental cubana, con la diferencia de que estos ocurrieron en la tarde.
¿Existe algún horario en que sea mayor la probabilidad sísmica? Un experto del Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas de Cuba (CENAIS) explicó que sí, y en este artículo de D-Cuba te resumimos los detalles.
A la 1:00 de la madrugada el Oriente de Cuba percibió el sismo de 6.1 grados que tuvo su epicentro a unos 35 kilómetros de la localidad de Chivirico en la provincia de Santiago de Cuba.
Aunque pudiese parecer absurdo pensar que es más probable que este tipo de eventos tengan un horario preferente, lo cierto es que, en algunas zonas del mundo, en especial áreas particulares del Caribe, existen condiciones externas que favorecen que en ciertos momentos del día la actividad sísmica aumente. En este caso, hablamos de las madrugadas.
Durante estas horas, en estudios realizados por casi 50 años (de 1970 a 2019), se observa una tendencia al aumento de sismos perceptibles en las áreas estudiadas, que incluyen Cuba, Puerto Rico y Colombia.
El nivel de ruido y de actividades generadas en el horario diurno no influye en los sismos detectados por los sismógrafos con los cuales se realizó el estudio. De hecho, los niveles de terremotos de bajas maginitudes y de terremotos moderados son similares durante todo el día.
Según el estudio, estos sismos suceden más en el horario comprendido entre las 8:00 de la noche y las 8:00 de la mañana, alcanzando un pico entre 12:00 de la noche y 4:00 de la mañana.
Esto tampoco se debe a que se realicen explosiones mineras en este horario, pues los sismógrafos están calibrados para no detectar estos eventos como sismos y son eventos de baja energía que, además, se realizan por lo general en el horario diurno.
Después de analizar este fenómeno por años, los expertos arribaron a la conclusión de que la causa más probable de la ocurrencia de sismos en las madrugadas se debe a variaciones en el campo magnético de la tierra.
En el estudio del CENAIS se cita el artículo científico “Evidence of Correlation between High Frequency Geomagnetic Variations and Seismicity in the Caribbean” publicado en Open Journal of Earthquake Research (2021), donde se expusieron resultados que demuestra la correlación que existe entre la variación del campo geomagnético registrado por un satélite geoestacionario y una estación geomagnética terrestre situada en San Juan, Puerto Rico.
En el estudio se plantea que, según lo planteado por la Ley de Faraday, cuando ocurren cambios en un campo magnético se genera una corriente eléctrica. La fuerza que podrá tener esta corriente estará determinada por la velocidad con la que ocurran cambios en el campo.
Los vientos solares influyen en la ionosfera, provocando cambios en el campo magnético de la tierra y generando corrientes eléctricas que pueden llegar al interior de esta.
Además, la atmósfera favorece la conducción eléctrica, ya que es ionizada por la radiación solar. En áreas con muchas tormentas eléctricas es normal que ocurran un fenómeno similar al de un generador que envía electricidad a la ionosfera, la cual regresa a zonas con buen clima.
Cuando los vientos solares influyen en el campo magnético de la tierra se añaden partículas cargadas a la ionosfera, que provocan que cambie el potencial eléctrico en la tierra.
Existen otros factores que influyen en que aumente la fuerza magnética, por ejemplo, que el campo magnético y el conductor están en ángulo recto, según la Ley de Laplace.
El Ecuador, por ejemplo, posee un campo magnético horizontal y es atravesado por el campo magnético vertical de los polos. Por ende, las corrientes eléctricas en el Ecuador son más fuertes que en las zonas cercanas a los polos.
¿Cómo influye esto en los terremotos? Algunos minerales terrestres, como el cuarzo, tienen propiedades piezoeléctricas. Muchas rocas de la corteza terrestre tienen en su interior cristal de cuarzo.
El cuarzo, cuando es sometido a una corriente eléctrica, comienza a vibrar. La fuerza de la vibración estará determinada por la fuerza de la corriente eléctrica a la cual sea sometido.
Esto no es determinante, ni todos los terremotos ocurren debido a este fenómeno. Los terremotos no son provocados por la electricidad, sino por las fallas en las placas tectónicas de la tierra.
La electricidad solo puede provocar que un terremoto se adelante, por lo cual estas perturbaciones al campo magnético de la tierra pueden considerarse una especie de “advertencia” de que ocurrirá un terremoto.
Estos factores, sumados a lo planteado respecto a que las corrientes de vientos solares ayudan a disipar las cargas eléctricas que recibe el campo magnético de la tierra, sostienen la teoría de que es más probable la ocurrencia de terremotos durante la madrugada.
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